Capitulo 62……… Amiga Del Pasado.

Disipe mi cabeza de esos pensamientos y mejor decidí salir de mi casa, tomar mi auto e ir con el ginecólogo.

En el camino como iba muy aburrida decidí poner la radio, pues estaba claro que la música era lo único que me des estresaba en ese momento, iba muy a gusto escuchando todo tipo de música, hasta que.

Radios: Y ahora para terminar con mi turno aquí les dejo la canción de “Torture” de The Jackson´s, los cuales hoy en la noche se presentaran en Washington en el RFK Stadium…

Apenas termine de oír eso y apague la radio, pero eso me había puesto a pensar;

“Este niño que esperaba también era de Michael, ¿Debería ir a buscarlo y decirle que estaba embarazada?”

Pero en ese instante en mi cabeza se genero una respuesta a aquella pregunta;

“¿Qué estas idiota? ¡Claro que no puedes ir! Aunque te duela, pero Michael cree que solo lo utilizaste para sacarle dinero, ¿Qué va a pensar si llegas embarazada? ¡Obvio! Que le quieres sacar más dinero”

Malo o bueno, pero mi cabeza estaba en lo cierto, no podía ir a decirle a Michael “Michael estoy embarazada” claro qué pensaría mal de mí, si de por si no haciendo nada malo no me creyó, ahora que piensa lo que piensa sobre mí, menos me va a creer.

Llegue al ginecólogo, pues era con el que me hacia los chequeos normales, entre y le dije a la recepcionista que cuando que si tenía una cita libre, ella dijo que si y me enlisto para 15 minutos después, dicho y hecho, al pasar esos 15 minutos me pidió que pasara y así lo hice.

Ginecólogo: Hola señorita Sánchez ¿Por qué tan pronto? Se supone que yo viajaría hasta Los Ángeles el siguiente año.

Sandra: Lo que pasa es que me devolví a México, pero ahora vengo a que me cheque de otra cosa.

Ginecólogo: ¿Ocurrió algo grave?

Sandra: No… lo que pasa es que estoy embarazada.

Ginecólogo: ¿¡Enserio!? ¡Que alegría! (Se puso serio) A checar como va ese embarazo.

Me recostó sobre una cama y puso un gel sobre mi abdomen, para luego pasar un aparato que mandaba una imagen a un pequeño monitor, el doctor movía el aparato y verificaba como estaba mi embarazo.

Ginecólogo: Bien… todo va en orden y sigue como vas ¿Quieres verlo?

Sandra: ¡Si! (Dije con emoción)

Volteo el monitor y me dejo ver la imagen de mi hermoso bebe, se veía oscuro y ahí era donde sobre salía él o ella, mis ojos se empezaron a llenar de lagrimas y mi corazón comenzó a latir de una manera inexplicable.

Ginecólogo: (Me dio un pañuelo) Ten.

Sandra: (Tomándolo) Gracias (Limpie mis lagrimas) ¿Es niño o niña?

Ginecólogo: (Observo el monitor) No te podría decir con certeza pero creo que es niña.

Sandra: Wau, es hermosa.

Me quito el aparato del abdomen e imprimió los ultrasonidos, me dio algo para limpiar el gel que me había puesto, abotone mi blusa y salí del consultorio, todavía no me reponía de lo que sentía, del hermoso sentimiento que es ver por primera vez a mi hermosa niña, seguía recorriendo las lagrimas mi rostro, pero esto no lo quería celebrar sola, así que decidí llamar Cristal.

Sandra: ¿Cristal? ¿Dónde estás?

Cristal: En mi casa ¿Por?

Sandra: ¿Puedo pasar por ti y vamos a comer?

Cristal: Claro.

Sandra: Bueno como en 15 minutos paso por ti… oye ¿Richard te comento algo ayer?

Cristal: Solo me dijo que te desmayaste.

Sandra: ¡Perfecto! Bueno cuando nos veamos te comento ¿Si?

Cristal: Claro.

Colgamos y yo emprendí camino a su casa, creo que la depresión o tristeza que pude haber sentido en algún momento se esfumo y ahora estaba llena de felicidad, de alegría, de todo menos tristeza.

Llegue en los esperado Cristal salió de su casa y se subió a mi auto, en el camino me preguntaba el porqué tenía la cara que tenia, pues si la verdad no paraba de sonreír, yo solo le respondía que espera que pronto lo sabría, llegamos a un restaurante que me gustaba mucho visitar, era algo caro, pero bueno de vez en cuando era bueno darse sus lujitos ¿No?

Cristal: (Sentada enfrente de mí) Ahora si dime.

Sandra: Bueno… lo que pasa es que… estoy embarazada.

Cristal: (Emocionada) ¿¡Enserio!?

Sandra: Si, estoy embarazada.

Cristal: (Me abrazo) Me alegro tanto… Richard ya lo sabe.

Sandra: Si… desde ayer, solo que pues… tu entenderás… con lo que paso con Michael, ayer me cayo como balde de agua fría… pero ahora estoy más que feliz.

Cristal: Que bueno mi niña… ¿Le dirás?

Sandra: No… no lo creo prudente.

Cristal: Pero…

Sandra: No, ya lo decidí, yo cuidare de esta hermosa niña…

Cristal: ¿Cómo sabes que es niña?

Sandra: Ya fui a hacerme el chequeo… aquí traigo los ultrasonido ¿Quieres verlos?

Cristal: Claro.

Veíamos las dos emocionadas los ultrasonidos, en un momento me recordó cuando mi mamá y yo vimos a mi primer hijo… cuando estaba más chica, pero ahora que sería diferente, porque si Dios me había dado la bendición de volverme a embarazar, después que medicamente me habían dicho que no, era por algo.

Seguíamos igual de emocionadas, le platicaba lo que sentía y también lo de Sebastián, necesitaba un consejo, pero no pudo dármelo, solo decía que oyera a mi corazón, pero eso era lo grave, estaba tan lastimado mi corazón que simplemente no le quería dar acceso a nadie.

******: ¡Sandra!

Enseguida voltee a ver quien había gritado mi nombre, pero nomas no reconocía esa chica.

******: No me digas que no me reconoces.

Sandra: Lo siento, pero no… tu vos si la reconozco pero no me acuerdo…

******: Como te olvidas fácil de tus mejores amigas de la infancia.

Sandra: ¿Lisa?

Lisa: Obvio soy yo.

Sandra: (Me levante y la abrace) Lo siento tanto… Pero (Me separe) Has cambiado tanto.

Lisa: Lo sé… me hice unos arreglos (Decía modelando su nuevo cuerpo)

Sandra: (Reí) Pues quedaste de lujo… te presento a Cristal… es la esposa de Richard.

Lisa: Hola (La abrazo) Wau… Hasta que el incasable se caso.

Sandra: Si… ¿Te quieres sentar con nosotras?

Lisa: Claro.

Lisa de verdad que había cambiado tanto su apariencia física, nos contaba los arreglitos a los que se había sometido, que se puso aquí... se quito acá… pero realmente quedo muy linda.

Estuvimos un rato ahí, pero Cristal tuvo que irse ya que había venido Richard por ella, así que Lisa y yo nos quedamos solas, empezamos a platicar sobre nuestras vidas, por desgracia me acordó a Michael.

Lisa: ¿Cómo vas con Michael?

Sandra: Amh, pues… terminamos.

Lisa: ¿¡Qué!?

Sandra: Tranquila no te exaltes… y si terminamos hace 3 meses.

Lisa: Pero… se veían tan felices.

Sandra: Si pues… ya sabes el tiempo pasa…

Lisa: ¿Ocurrió algo?

Sandra: Si…

Le di un breve resumen de lo que había pasado con Michael, lo que había pasado con Raúl, lo que Lucia hizo, de todo un poco.

Lisa: Pero si que Michael es un idiota.

Sandra: Bueno lo supieron engañar… espérate y todavía no te eh contado lo último.

Lisa: ¿Hay más?

Sandra: Si… estoy embarazada.

Lisa se notaba que no sabía que responder, solo que cuando le cayó el veinte me abrazo y felicito, le dije que no le diría a Michael y como ella también era amiga de él, le dije que no le dijera ni donde me encontraba, ella acepto, aunque me dijo que lamentaría esa decisión, yo simplemente le respondí, que jamás me hecho para atrás en mis decisiones.

La invite a mi casa, ella claro que acepto, también a ella le pedí un consejo y me dijo casi lo mismo, pero que esperara un tiempo, a que mis sentimientos se aclararan, pero bueno eso ya lo había pensado, así que así seria, le pediría tiempo, le diría que no estoy lista para rehacer mi vida amorosa.

Llegamos a mi casa y ahí se encontraba Sebastián, quien estaba leyendo un libro de medicina o algo así.

Sandra: Mira el es…

Lisa: ¡Sebastián Bracho!

Sandra: Así es ¿Se conocen?

Sebastián: Si…

Lisa: Si… él fue el cirujano que me hizo este pequeño arreglo.

Nos sentamos a tomarnos un café mientras platicábamos, de vez en cuando sentía las miradas que me echaba Sebastián, claro que se notaba lo enamorado que estaba de mi, y yo pues… lo quería de eso estaba más que segura, lo quería y mucho y no lo quería hacer sufrir haciéndole ilusiones de algo que tal vez no pasara.

¿Cómo decirle a alguien que necesitas tiempo para pensar si lo quieres más? ¿Cómo le haces para no lastimarlo? No sabía las respuestas de estas preguntas que de verdad necesitaba, por lo menos ahora ya no estaría tan sola, pues había vuelto a encontrar a mi amiga del pasado.